Corté en cubos unos tomates, corté unos ajíes y cebolla. Lo asusté con aceite y lo mandé, tapado, 10 minutos al microondas. Como las cebollas estaban testarudas para ablandarse, lo mandé otros 10; ahí se convencieron. Mientras...
Saqué dos filets de merluza del freezer y los corté. En otro momento los hubiera despedazados, pero hoy me dio por el cuchillo.
Saqué la supuesta salsa, le agregué la merlucita...
la mezclé y y la mandé cinco minutos más, tapado.
La saqué, la asusté con vino tinto y...
le agregué el ingrediente secreto: fideos. Lo tapé y lo mandé 10 minutos más.
Y listo. Ahí está la merluza... ¡¡¡ANDÁ A ENCONTRARLA!!!
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