En una bolsa para horno, desacomodé cebollas, manzanas verdes (despepitadas) -ambas cortadas gruesas-, ajo (con cáscara, pero pinchado) y medio ají putaparió.
En un recipiente puse salsa barbacoa y le agregué licor de café al cognac...
destripé las (sic) mondiolas...
las mezclé con lo que ya estaba dentro de la bolsa, y le agregué le mezcleche de barbacoa. Lo batí como si fuera un cóctel y lo dejé en la heladera, toda la noche.
La mediodía siguiente, acomodé la bolsa (con las cebollas de fondo y encima lo demás) en una asadera y la puse 40 minutos en el horno, con las velas de abajo, a "casi" doscientos grados. Después subí la temperatura a 250 grados y encendí las velas superiores.
Saqué la asadera y saqué todo de la bolsa (OJO CON EL VAPOR QUE SALE AL ABRIR O ROMPER LA BOLSA); rebané la carne y dejé tanto líquido como fuera necesario para que quedase todo cubierto. Lo mandé quince minutos más a "todo trapo" y...
¡LISSSSSSSSTO!