Como ya conté, la ansiedad me empuja a hacer algunas cosas.
Bueno, lo que sigue es el encuentro de mi ansiedad, un kilo de carne picada y otros elementos...
Rallé cebollas, zanahorias, morrones y dientes de ajo picado.
Lo cociné destapado en microondas, durante cuatro ciclos de cinco minutos cada uno, retirando y mezclando en cada retiro.
Puse la verdura cocida...
le agregué la carne picada y mezclé. Le puse sal, pimienta, orégano y condimento para pizza. Después dividí en dos partes.
A una de las mitades, le puse jugo de limón y la dejé en la heladera, esperando su turno.
A esta mitad le puse mostaza, un huevo, ketchup y mezclé.
Como quedó medio chirle, le agregue copos de maíz, molido. Mezclé.
Armé hamburguesas "como Dios manda"...
y las dejé enfriar.
En una tapa de empanada rotisera, puse un poco de salsa barbacoa (aunque alguna vez le puse cebolla, ajíes y ajo dorado; otras le puse alguna feta de queso o chédar, o mostaza, o nada)
acomodé la hamburguesa...
por encima le puse un poco más de barbacoa y la tapé con otra tapa.
Las acomodé en una fuente...
las pinché y las mandé a cocinar...
¡LISTO! con esto.
Y con la otra mitad...
puse el relleno sobre una tapa de empanada rotisera...
fui cerrando, de modo que una solapa se uniera con la otra...
doblé la cola, las mandé al horno...
Y, ¡LISTO!